Microrrelato: La prueba de la torre
—Esta es la torre de la Carbonera —dijo Sara a su novio, leyendo la guía de turismo de Huelva—. Hay una leyenda en torno a ella, llamada «La prueba de la torre»: aquel amante que quiera demostrar que sus sentimientos son sinceros, debe ascender a la torre por la escalera interior de piedra. Al llegar arriba, si su amor es puro, podrá descender sin problema. Pero si es falso, la escalera desaparecerá, y quedará atrapado allí para siempre… Andrés, ¿tú te atreverías a…?
—¡Claro!— respondió Andrés con una sonrisa. Casi de un salto entró en la torre, y, tras unos minutos, su cabeza asomó por la almena.
—¡Hola! —exclamó, saludando con la mano.
Sara le devolvió el saludo. Entonces su móvil vibró por un mensaje entrante. Era de Estela, su mejor amiga.
«Sara, no aguanto más, tengo que confesarte algo: antes de iros de vacaciones, Andrés y yo…»
Sara sintió un nudo en el estómago. Miró arriba y no vio a Andrés.
—¡Sara! ¡No puedo bajar! ¡La escalera…!
Sara echó a andar por las dunas, en dirección a la playa.
—¡Sara!
La brisa marina la reconfortó, y decidió no mirar atrás…
Nunca más… —¡Sara!
Autor: Francisco G. Vivanco Díaz, de Marbella (Málaga)
Escucha el microrrelato
Narrado por Javier Vences Benito y Francisca Vaquero Rodrigo
Fotografía de Diego Delso, delso.photo, License CC-BY-SA